Lubricantes más empleados en la industria HVACR
Durante los últimos años, la relación entre el lubricante y el refrigerante ha tomado gran importancia en la capacitación de técnicos HVACR, por lo que es un tema que debes tener muy claro
Gabriel Carrillo / Fotografías cortesía de ACEMIRE
Hoy en día, existen tantos aceites lubricantes como refrigerantes en el mercado, por ello, los fabricantes de compresores siempre especifican el tipo de lubricante y la viscosidad para cada modelo. Sin embargo, uno de los errores más comunes mientras se realiza un servicio es no verificar, precisamente, el tipo de lubricante apropiado, lo cual provoca serios daños al sistema debido a la no compatibilidad con el refrigerante y los componentes.
En un sistema hermético, que se encuentra en íntimo contacto con los devanados del motor eléctrico, el lubricante debe tener una buena compatibilidad, además de contar con propiedades térmicas muy estables. Por otro lado, debe ser capaz de resistir tanto una alta temperatura en la descarga del compresor como una baja temperatura en la válvula de expansión y ser lo suficientemente soluble con el refrigerante, de manera que con el tiempo éste no se quede sin su aceite lubricante, lo que derivaría en una falla mecánica.
Es muy importante saber que para un buen desempeño en la capacidad y la eficiencia de los equipos de refrigeración y aire acondicionado, el lubricante y el refrigerante deben tener una cualidad entre sí: miscibilidad (que se puedan mezclar). Por su parte, el compresor hará que un porcentaje del lubricante se encuentre en el circuito de refrigeración, ya sea en el condensador o en la válvula de expansión o en el evaporador, y retornará a su punto inicial o donde se almacena éste (en el calentador de cárter), lo cual se hace por medio de la línea de succión del refrigerante al compresor.
Tienes que recordar que dentro del compresor se encuentran partes mecánicas en movimiento, como pistones, cigüeñal, bielas, baleros, rotor, estator, entre otros. Dicho movimiento provocará desgastes por la fricción en las partes metálicas y aumentará la temperatura de manera considerable en el cuerpo del compresor, cuyo efecto es por falta de lubricante en el calentador del cárter del compresor o por degradación del lubricante mal seleccionado, produciendo así un daño muy severo.
Entonces, un aceite lubricante es un producto formado por un aceite base, generalmente derivado del petróleo, y unos aditivos que deben cumplir con ciertas características:
- Antioxidante
- Antiherrumbre
- Detergente
- Dispersante
- Mejorador del índice de viscosidad
- Antidesgaste
- Depresor de la congelación
Características más sobresalientes
- Ser miscibles con el refrigerante utilizado
- Estables con las bajas temperaturas de evaporación
- Estables con las altas temperaturas de descarga
- Nula absorción de agua, no higroscópico
- Viscosidad estable tanto en baja como en alta presión
- Alta estabilidad química al circular por el circuito
Fundamentos para la elección del lubricante
Además de lubricar de la manera correcta, alargando la vida útil de los elementos en fricción, deberás seleccionar un aceite que no tenga los siguientes efectos adversos:
- Reacción química con la humedad del sistema, produciendo lodos. Todos los lubricantes reaccionan en mayor o menor proporción con el agua
- Reacción química con los elastómeros del compresor y de la instalación, produciendo fugas del refrigerante
- Separación de los elementos que componen el aceite, cambiando sus propiedades básicas
- Congelación del lubricante, como consecuencia de sus nuevas propiedades adquiridas con la humedad
- Vaporización de aceite en la compresión, migrando al sistema con riesgo de que el compresor se quede sin lubricante
Así, el lubricante debe ser compatible con el refrigerante que utilice el compresor. Por otro lado, existen varios tipos de lubricantes que están hechos a base de mineral (MO), alquilbenceno (AB), polioléster (POE), polialquilenglicol (PAG), polialfaolefina (PAO) o polivinil-éter (PVE).
Al ser todos los aceites sintéticos (como los aceites a base de éster POE, PVE y PAG) y extremadamente higroscópicos (que absorben fácilmente la humedad), cuando trabajes en un sistema con cualquiera de ellos, debes tener cuidado de evitar el ingreso excesivo de humedad al sistema.
Por ejemplo, mientras que el aceite mineral tiene un límite de saturación de agua de sólo 25 partes por millón (ppm), los nuevos aceites sintéticos absorben concentraciones de agua mucho más grandes; es decir, el aceite POE tiene un límite de saturación de 2 mil 500 ppm (100 veces más que el aceite mineral); el PVE de 6 mil 500 ppm (260 veces más), y el PAG de 10 mil ppm (400 veces más).
Si hay mucha más cantidad de agua, sigue al pie de la letra los métodos de triple evacuación, y antes de realizar un cambio de lubricante, verifica que sea del tipo y la viscosidad que recomienda el fabricante del compresor o consulta las instrucciones del manual.
Gabriel Carrillo es técnico profesional en Ingeniería de Producción e instructor de Refrigeración y Aire Acondicionado, así como de Mecánica Industrial. Se desempeña como instructor, tanto en pláticas técnicas como promoción de productos, y es asesor técnico en ACEMIRE de México, S.A. de C.V.